Entradas

Mostrando entradas de septiembre 22, 2013
Imagen
En ocasiones se une indisolublemente el camino hacia Dios con el sacrificio que duele. San Ignacio, por ejemplo, entiende el sacrificio como salir de "nuestro propio sentir y querer", como un camino del amor propio al amor a Dios y a los demás. El sacrificio, en ocasiones,  es necesario si queremos amar verdaderamente a alguien porque significa renunciar al  propio bienestar. Pero no creemos que el sacrificio sin más sea algo necesario para amar. Los cristianos no creemos que el sacrificio geste el amor, como tampoco creemos que el castigo haga a una persona obediente. No, por lo menos de modo tan tajante. Cuando recordamos a María de los Dolores, de pie ante la cruz, intuimos el desgarrador desconsuelo de la Madre. En ese dolor que hasta puede exceder toda comprensión humana, solo se nos hace comprensible cuando entendemos que lo sostiene un amor tan grande a Dios y una entrega absoluta a su voluntad. Pero debemos tener cuidado del razonamiento que dice que “Dios hace su
Imagen
En realidad, ¿qué define quiénes somos? O si se quiere, ¿por medio de qué deseamos que nos definan?. ¿Acaso por lo que hacemos?  ¿Tal vez por nuestros valores? ¿Será por las relaciones que frecuentamos, con quiénes nos “codeamos”?  ¿Será por  los bienes que poseemos o por los lugares que visitamos?... Cuando Jesús pregunta a sus discípulos “¿Quién dice la gente que soy Yo?”, no lo hace porque tenga problemas de identidad, y necesite que desde afuera le llegue la respuesta a este vital interrogante. Lo hace porque desea conocer cómo se definen los discípulos a sí mismos. Hay muchas personas que se han olvidado de quiénes son porque están todo el tiempo buscando que se reconozca lo que hacen.  Se buscan en la mirada ajena, y no en la propia…Cuando creemos que somos lo que hacemos, corremos el riesgo de perder nuestra verdadera identidad…Es cuando el ego “se come” al alma.  No somos lo que hacemos. Somos mucho más. Somos hijos, hermanos, amigos. Nuestras relaciones nos ayudan
Imagen
Hoy tuve la bendición de ser testigo de un encuentro del más puro amor entre dos niños de 5 o 6 años aproximadamente. Uno de ellos tenía clavadas varias astillas de madera en una de sus manitos. Entre lágrimas y sollozos intentaba, sin éxito, retirarse las astillas. Con cada intento una nueva lágrima corría por su regordeta mejilla. Otro niño que lo estuvo observando intrigado durante algunos minutos, se levantó del arenero y se le acercó resueltamente.. No se conocían. Estab an ocasionalmente juntos en una plazoleta de juegos. Yo los tenía a ambos a no más de dos metros de donde estaba sentada. El primero lloraba y su mamá desde lejos le decía que se marcharan a casa donde le lavaría las manos y le retiraría las astillas. El segundo, venciendo cierta timidez calculo yo, de pronto se acercó al niño lastimado y le dijo con autoridad: “Dame la mano, te voy a ayudar”. Así, sin esperar la respuesta del otro niño, le tomó la mano y con mucha delicadeza fue apretándole la piel en los luga
Imagen
La doctrina de Jesús no es un rejunte de principios teóricos o abstractos sino una invitación a vivir conforme al anuncio de su mensaje. Nuestro “modo de proceder” debe ir conformándose cada vez más con la Buena Noticia que hemos recibido. Nuestro modo de vivir debe ser el reflejo de nuestras plegarias. Y nuestras oraciones iluminar y transformar nuestras actitudes. Las verdaderas actitudes cristiana nacen del encuentro con el Padre y no del arte de saber justificarse como el fariseo que se creía justo por cumplir la ley. Nuestro compromiso como cristianos con Jesús es unirnos a la misión que recibió del Padre; convertir éste mundo un lugar de fraternidad. Al juzgar por lo que vivimos pareciera que muchos cristianos prefieren vivir su fe en un “ámbito muy privado” y no comprometerse demasiado. Hay quienes prefieren mostrarse compasivos y misericordiosos ante los demás, antes que serlo realmente. Maquiavelo decía; es más “útil” aparentar tener que poseer. ¿Triste, no? Debemos t
Imagen
Cuando rezas con esperanza, te inclinas hacia Dios, confiando plenamente en que Él es leal y cumple sus promesas. Esta esperanza te brinda una nueva libertad que te permite ver la vida en forma realista, sin sentirte desanimado. Esta libert ad se pone de relieve en las palabras de otro estudiante que escribió: Esperanza significa seguir viviendo en medio de la desesperación, y mantenerse animoso en la oscuridad. Esperanza es saber que existe el amor, es confiar en el mañana, es irse a dormir y volver a despertar cuando sale el sol. En medio de un ventarrón en el mar, es descubrir tierra firme. En los ojos del otro, es ver que eres comprendido. Siempre que quede esperanza, habrá también oración... Y serás sostenido por las manos de Dios. Henri Nouwen
Imagen
Nuestra primera tarea es romper la indiferencia. Resistirnos a seguir disfrutando de un bienestar vacío de compasión. No continuar aislándonos mentalmente para desplazar la miseria y el hambre que hay en el mundo hacia una lejanía abstracta , para poder así vivir sin oír ningún clamor, gemido o llanto. El Evangelio nos puede ayudar a vivir vigilantes, sin volvernos cada vez más insensibles a los sufrimientos de los abandonados, sin perder el sentido de la responsabilidad fraterna y sin permanecer pasivos cuando podemos actuar. José Antonio Pagola

EL PAPA FRANCISCO EXPLICA CÓMO PODEMOS CONOCER A JESÚS

Imagen
" Se puede conocer verdaderamente a Jesús mediante la mente, el corazón y la acción. “Se debe conocer a Jesús en el Catecismo. Pero no es suficiente conocerlo con la mente: es un paso.  A Jesús es necesario conocerlo en el diálogo con Él, hablando con Él, en la oración, de rodillas. Si tú no rezas, si tú no hablas con Jesús, no lo conoces. Tú sabes cosas de Jesús, pero no vas con el conocimiento que te da el corazón en la oración. Conocer a Jesús con la mente, el estudio del Catecismo; conocer a Jesús con el corazón, en la oración, en el diálogo con Él. Esto nos ayuda bastante, pero tampoco es suficiente... Hay un tercer camino para conocer a Jesús: es el seguimiento. Ir con Él, caminar con Él”. Es necesario “andar, recorrer sus caminos, conocer a Jesús con el lenguaje de la acción”. “Si yo conozco a Jesús así, me implico con Él”: “No se puede conocer a Jesús sin implicarse con Él, sin jugarse la vida por Él. Cuando tanta gente – también nosotros – se hace esta pregunta: ‘¿Pero
Imagen
Imagen
Imagen
Hoy elijo transitar el día con paciencia y con la lentitud necesaria para no perderme ninguno de los regalos que me ofreces a diario, Señor.  Elijo confiar en tus designios, aunque me resulten incomprensibles. Elijo ponerme bajo el manto de María, porque no hay otro lugar mejor para el cobijo y la esperanza. Hoy elijo orar por todos los que conozco, pertenezcan a mi círculo de afectos o no. Elijo leer y saborear tu Palabra, Señor y sacar provecho de ello. @Ale Vallina
Imagen
No me grites. Te respeto menos cuando lo haces. Y me enseñas a gritar a mí también y yo no quiero hacerlo. Trátame con amabilidad y cordialidad igual que a tus amigos. Que seamos familia, no significa que no podamos ser amigos. Si hago algo malo, no me preguntes por qué lo hice. A veces, ni yo mismo lo sé. No digas mentiras delante de mí, ni me pidas que las diga por ti (aunque sea para sacarte de un apuro). Haces que pierda la fe en lo que dices y me siento mal. Cuando te equivoques en algo, admítelo. Mejorará mi opinión de ti y me enseñarás a admitir también mis errores. No me compares con nadie, especialmente con mis hermanos.Si me haces parecer mejor que los demás, alguien va a sufrir (y si me haces parecer peor, seré yo quién sufra). Déjame valerme por mí mismo. Si tú lo haces todo por mí, yo no podré aprender. No me des siempre órdenes.Si en vez de ordenarme hacer algo, me lo pidieras, lo haría más rápido y más a gusto. No cambies de opinión tan a menudo sobre
Imagen
Imagen
Dios está mucho más presente de lo que te puedas imaginar en todo lo que vives. Sólo tienes que desear encontrarlo y Él se hará presente en tu vida. ¡Eso si! Deja que sea Dios quien se manifieste a su manera... y tú estáte atento.
Imagen
¡Te necesito a Ti, sólo a Ti! Deja que lo repita sin cansarse mi corazón. Los demás deseos que día y noche me embargan son falsos y vanos hasta sus entrañas. Como la noche esconde en su oscuridad la súplica de la luz, así en la oscuridad de mi inconsciencia resuena este grito: ¡Te necesito a Ti, sólo a Ti! Como la tormenta está buscando la paz cuando golpea la paz con su poderío, así mi rebelión golpea tu amor y grita: ¡Te necesito a Ti, sólo a Ti!

El poder de la bondad.

Imagen
Por momentos, cuando te detienes a pensar en la inmensa cantidad de gente que ha pasado por tu  vida, y de la manera en cómo han influido, te quedas con la sensación de que llevas un tesoro en vasija de barro. ¡Tenemos tanto de los demás! Es verdad que no todos los encuentros has sido igualmente beneficiosos o sanos, pero aún de aquellos de los que te quieres olvidar te han aportado algo. Puedes afirmar que estas en paz y reconciliado con lo que te ha tocado vivir, cuando puedes capitalizar tus experiencias, aun las que calificas de negativas,  y extraer sabiduría y bondad. Hay personas que han pasado por nuestra vida regalando alegría y con ello nos han dado esperanza de un mundo mejor. Cuando descubres a alguien que te ilumina con su bondad, son su alegría, con su simpatía, crees profundamente en que vivir es un don maravilloso. ¡No existe mayor motivación para ser bueno que cuando ves sonreír al pobre, al que sufre, al que han abandonado, al que encontró en ti una mirada co
Imagen
Me preguntaba mientras leía el diario digital en la mañana, por qué no hay lugar para las buenas noticias. Por qué vende lo malo cuando existen tantas buenas novedades y sucesos. Claro que exíste la maldad, los  asesinatos y los atentados. De hecho ayer hubo un feroz ataque en un centro comercial en Kenia, que dejó el triste saldo de decenas de muertos y heridos…y así la lista de maldad sigue. Pero me pregunto: es que acaso no hay buenas nuevas que publicar?. Cada día en nuestro bendito planeta nacen miles de miles de niños. La mayoría de ellos se convertirán en adultos, hombres y mujeres de bien. Personas que se levantarán cada uno de sus días para trabajar, estudiar, cuidar a sus familias y crear un mundo mejor… Cada día cientos de miles de personas actúan en favor de sus hermanos, curan heridas del cuerpo y del alma, protegen la fauna y la flora del planeta, luchan contra el aborto y la trata de personas, atienden solícitamente a sus familias y educan e instruyen a muchos mil
Imagen
¿Te han dicho alguna vez “no me entiendes” cuando estabas convencido de que sí lo estabas haciendo?. La verdad es que resulta muy gratificante cuando te sientes entendido por otra persona. Cuando esto ocurre se experimenta un cierto alivio,  algo muy parecido a la tranquilidad, a la paz… ¿Por qué? Porque en el fondo cada persona siente que no se le está permitido ser auténticos. Tal vez porque se tuvo la desagradable experiencia de que no se le permitió expresar lo que verdaderamente sentía, o porque sencillamente percibíó que disminuía el aprecio de los demás. Pero, sin embargo, anida en todo ser humano el deseo profundo de sentirse plenamente sí mismo en presencia de otra persona y no sentir el juicio ni la reprobación. ¿Por qué reprobamos a los demás? Básicamente porque los juzgamos desde los propios parámetros... Es imposible no juzgar, además, no tiene por qué tener una connotación negativa. ¡Juzgamos todo el tiempo! Juzgar es lo mismo que decir, clasificar, distinguir, ord
Imagen
René Lenoir, en su libro Les Exclus, habla de los indios de Canadá. Si ante un grupo de niños se promete un premio al primero que responda una pregunta, todos se ponen a buscar la solución juntos y cuando están de acuerdo responden gritando todos al mismo tiempo. Para ellos sería intolerable que ganara uno y perdiera la mayoría; el que ganara se separaría del resto de sus hermanos. Habría ganado el premio pero habría perdido la comunidad. Nuestra civilización occidental es una civilización competitiva. Desde el colegio el niño aprende a "ganar"; sus padres están encantados cuando es el primero. El progreso material individualista y el deseo de grado en el prestigio pisotean el sentido de la comunión, de la compasión, de la comunidad. Jean Vanier
Imagen
La Iglesia no tiene otra razón de ser ni otra finalidad que dar testimonio de Jesús. No lo olvidemos. Papa Francisco
Imagen
Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento. Victor Frankl

«Vivir después de los errores»

Imagen
« 1Dijo también a sus discípulos: "Había un hombre rico que tenía un mayordomo, y este fue acusado ante él como derrochador de sus bienes.  2 Entonces lo llamó y le dijo: "¿Qué es esto que oigo acerca de ti? Da cuenta de tu mayordomía, porque ya no podrás más ser mayordomo".  3 Entonces el mayordomo dijo para sí: "¿Qué haré?, porque mi amo me va a quitar la mayordomía. Cavar, no puedo; mendigar, me da vergüenza.  4 Ya sé lo que haré para que, cuando se me quite la mayordomía, me reciban en sus casas".  5 Y llamando a cada uno de los deudores de su amo, dijo al primero: "¿Cuánto debes a mi amo?".  6 Él dijo: "Cien barriles de aceite". Le dijo: "Toma tu cuenta, siéntate pronto y escribe cincuenta".  7 Después dijo a otro: "Y tú, ¿cuánto debes?". Este contestó: "Cien medidas de trigo". Él le dijo: "Toma tu cuenta y escribe ochenta".  8 Y alabó el amo al mayordomo malo por haber actuado sagazmente, por
Imagen