Cuidar el envío



Día 1

Con Jesús por la mañana. “Si en un lugar no los reciben ni los escuchan, salgan de allí y sacudan el polvo de los pies como protesta contra ellos” (Mc 6, 11). Jesús envía a sus discípulos en misión y los advierte de que el fracaso es posible. El envío de Jesús a sanar y vivificar es lo verdaderamente importante, los resultados de todo lo que emprendas Él los pondrá a su tiempo. ¡Confía, aunque surjan dificultades! ¿Te sientes llamado a bendecir, iluminar, dar vida? Cuida este llamado y llévalo adelante. Ofrece el día por la intención del Papa. 

Con Jesús por la tarde. El tiempo es superior al espacio (Primera Parte). “Darle prioridad al tiempo es ocuparse de iniciar procesos más que de poseer espacios…Se trata de privilegiar las acciones que generan dinamismos nuevos en la sociedad e involucran a otras personas y grupos que las desarrollarán, hasta que fructifiquen en importantes acontecimientos históricos” (Papa Francisco). Tus emprendimientos son más importantes por los caminos que abren que por los resultados. Reflexiona ¿Cómo juzgas lo que haces? ¿Valoras los procesos, aunque los resultados no acompañen?

Con Jesús por la noche. Crecer en libertad. Aquieta el corazón y mira cómo has vivido hoy tu libertad. Agradece el amor dado y recibido. ¿Reconoces los momentos en que has estado animado, esperanzado y de buen humor? ¿Qué actitudes se despertaron en ti? Detente a disfrutar y agradece esa experiencia de libertad. Toma un compromiso para cultivar el ánimo y buen humor para mañana.

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