"Hablar de conversión sin preocuparse por corregir los viejos modos de proceder es seguir relatando un cuentos de hadas. Cuando estás enamorado de verdad, tus acciones cambian." Javier Rojas sj
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Mostrando entradas de septiembre 16, 2012
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"Todo brota de una convicción radical. Dios no abandona ni se desentiende de aquellos a quienes crea, sino que sostiene su vida con amor fiel, vigilante y creador. No estamos a merced del azar, el caos o la fatalidad. En el interior de la realidad está Dios, conduciendo nuestro ser hacia el bien." José Antonio Pagola
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¿Te enojas contigo mismo cuando cometes el mismo error? Existe una reacción casi inmediata a “esconder” los errores cuando los cometemos. Tal vez porque hemos internalizado las correcciones o reprensiones de nuestros padres. Cuando cometemos errores tenemos siempre el cuidado de que no se note, o por el contrario, borrar esa acción errónea con otra. Y aquí es donde se encuentra el mayor problema. La causa por la que cometemos, generalmente, el mismo error de debe a la falta de reflexión sobre los actos realizados. Si nos apresuramos a “borrar” una acción errónea con otra o a esconderla sin reflexionar previamente sobre el error cometido, lo más probable es que lo volvamos a cometer. Cuando no se reflexiona adecuadamente sobre los “errores”, “fracasos”, “metidas de pata”, etc., ni sobre los sentimientos que ellos acarrean, sino que por el contrario intentamos “borrarlos” de la conciencia propia y de los demás con nuevas acciones, es evidente que no hemos aprendido nada. Por e
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Trato de acercarme a mi oración como al lugar del desvelamiento, al ámbito de la diafanidad. Orar es hacer posible el éxtasis o, más discretamente, el éxodo: salir de mí mismo, hacia un Lugar inalcanzable donde Él y la Vida me salen al encuentro de un modo diferente a la errancia, al extravío de mi torpe autocentramiento. Mi oración se ha ido simplificando con el tiempo. No hay textos. Sólo un rincón en mi habitación y un icono. Allí me recojo en la noche, cuando todo calla. Convocado al Silencio, una Presencia se desvela. Sentado sobre un banquillo, la cercanía del suelo me ‘humilla’, me hace tierra. Necesito este contacto con el principio que me fundamenta, del cual emerge la verticalidad de mi ser como presencia y ofrecimiento. Tomo entonces conciencia del altar de mi cuerpo, copa y ofrenda. Y a través de la respiración me adentro en el movimiento primordial de la vida: inspirando, acojo el don de la existencia que me es dado en este momento; expirando, trato de entregar el mism
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Señor, Tú me conoces desde siempre; conoces mi vida y mi corazón. Todo lo bueno que he aprendido y comunicado ha hundido su raíz en Ti. Tú has sido, a pesar de mis pecados, el Señor de mis alegrías y de mis penas. Renueva en mí la capacidad de amar y de servir con toda la fuerza del amor primero, y sorpréndeme nuevamente recogido en tu presencia. Haz posible lo imposible: compromete mi vida para siempre con un amor fuerte y responsable, fiel a los últimos, a los pobres, a los hermanos, en los que Tú, Señor, estás presente. Amén. John Henry Newman
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Intenciones del Papa Benedicto XVI para este mes: Septiembre de 2012 General: Los políticos Para que los políticos actúen siempre con honradez, integridad y amor a la verdad. Misionera: Ayuda a las iglesias pobres Para que aumente en las comunidades cristianas la disponibilidad al envío de misioneros, sacerdotes y laicos, y de recursos concretos a las iglesias más pobres.
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Jesús ha gastado cada minuto de su vida en un continuo acto de servicio. Ese es el secreto de su triunfo. De su muerte va a brotar en seguida la resurrección. De la entrega total brota el optimismo cristiano. Hoy mucha gente vive triste, angustiada por la crisis internacional, por los problemas que azotan a la sociedad, a la Iglesia, a los individuos. Es cierto que debemos poner toda la carne en el asador para solucionarlos, casi como si sólo dependieran de nuestras fuerzas y nuestro interés. Pero luego ¿por qué estar tristes? Un hombre de fe que vive su disponibilidad, su diaria entrega a los hermanos, tiene dentro de sí el secreto de la Pascua. ¿Cuál es el secreto del optimismo? Creo que simplemente un problema de fe. Yo creo en Dios. Yo creo en Cristo. ¿No basta esto para tener un gran optimismo? ¿Qué me puede pasar que me quite la alegría de estar salvado por Jesús y de entregar mi pequeña existencia al servicio de los demás? Creo que este fue el secreto de los santo
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Llorar, gritar, dar una nota discordante… no siempre es malo. Son mecanismos de ajuste y equilibrio que cuidarán nuestra salud física y moral; que descargarán las tensiones reprimidas y evitarán dolores de cabeza, úlceras irritantes y conflictos en nuestro círculo familiar. Lo malo es “aguantar como un guerrero”. Lo malo es no saber llorar. Lo malo es no tener un amigo con el que poder tomar un café y hablarle de nosotros mismos, cuando es la verdad que nos sentimos muy gratificados en su modo de comprendernos, en su modo de hacer importantes nuestras “pamplinas” y nuestras aparentes “tonterías”… ¡Cuántos amigos de éstos nos harían falta! Y cuántas tensiones pueden quedar desparramadas en la mesa de una cafetería. Y si tenemos que llorar, lloramos, y si tenemos que gritar, gritamos, y si tenemos que romper un plato, pues lo rompemos. Pero hay que sacar los demonios que llevamos dentro, las angustias que nos oprimen, las depresiones que nos ahogan… para que podamos sonreír… Edicione
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Jesús, mi Dios, mi Redentor, mi Amigo, mi íntimo Amigo, mi corazón, mi cariño. Aquí vengo, Señor, para decirte desde lo más profundo de mi corazón y con la mayor sinceridad y cariño de que soy capaz, que no hay nada en el mundo que me atraiga, sino Tú sólo, Jesús mío. No quiero las cosas del mundo. No quiero consolarme con las criaturas. Sólo quiero vaciarme de todo y de mí mismo, para amarte sólo a Ti. Para Ti, Señor, todo mi corazón, todos sus afectos, todos sus cariños, todas sus delicadezas... ¡Oh Señor!, no me canso de repetirte: nada quiero sino tu amor y tu confianza. Te prometo, te juro, Señor, escuchar siempre tus inspiraciones, vivir tu misma vida. Háblame muy frecuentemente en el fondo del alma y exígeme mucho, que te juro por tu Corazón hacer siempre lo que Tú deseas, por mínimo o costoso que sea. ¿Cómo voy a poder negarte algo, si el único consuelo de mi corazón es esperar que caiga una palabra de tus labios, para satisfacer tus gustos? Señor
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Recuerdo un comentario en la Biblia Latinoamericana, a propósito de los que ya no ven a la Iglesia como madre...Hoy son 99 ovejas fuera del redil, y muchos nos empeñamos en trabajar con la ovejita que se quedó, y así no exigirnos demasiado... ¡Cómo faltan esos gestos que sirvan de disparadores de una transformación del corazón, y de la vista! Y..¡locos que se animen a exponerse! Kelo Sj.
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Evangelio de hoy Cuando Jesús terminó de decir todas estas cosas al pueblo, entró en Cafarnaún. Había allí un centurión que tenía un sirviente enfermo, a punto de morir, al que estimaba mucho. Como había oído hablar de Jesús, envió a unos ancianos judíos para rogarle que viniera a curar a su servidor. Cuando estuvieron cerca de Jesús, le suplicaron con insistencia, diciéndole: "El merece que le hagas este favor, porque ama a nuestra nación y nos ha construido la sinagoga". Jesús fue con ellos, y cuando ya estaba cerca de la casa, el centurión le mandó decir por unos amigos: "Señor, no te molestes, porque no soy digno de que entres en mi casa; por eso no me consideré digno de ir a verte personalmente. Basta que digas una palabra y mi sirviente se sanará. Porque yo -que no soy más que un oficial subalterno, pero tengo soldados a mis órdenes- cuando digo a uno: 'Ve', él va; y a otro: 'Ven', él viene; y cuando digo a mi sirviente: '¡Tien
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Entramos a la nueva semana laboral y de estudios pintándonos la cara "color esperanza"... Sé que hay en tus ojos con solo mirar Que estás cansado de andar y de andar Y caminar , girando siempre en un lugar.. Sé que las ventanas se pueden abrir Cambiar el aire depende de ti Te ayudará, vale la pena una vez más. Saber que se puede, querer que se pueda Quitarse los miedos sacarlos afuera Pintarse la cara color esperanza Entrar al futuro con el corazon. Es, mejor perderse que nunca embarcar Mejor tentarse a dejar de intentar Aunque ya ves que no es tan fácil empezar. Se que lo imposible se puede lograr Que la tristeza algún día se irá Y asi será la vida cambia y cambiara.. Sentirás que el alma vuela Por cantar una vez mas Saber que se puede, querer que se pueda Quitarse los miedos sacarlos afuera Pintarse la cara color esperanza Entrar al futuro con el corazón. Vale más poder brillar Que solo buscar ver el sol Pintarse la cara c
«El dios imaginado»
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Domingo 16 de septiembre –XXIV – Tiempo Ordinario Palabra de Dios Primera Lectura: Is 50, 5-9 Sal 114, 1-6. 8-9 Segunda Lectura: Sant. 2, 14-18 «27 Salió Jesús con sus discípulos a las aldeas de Cesarea de Filipo; y en el camino preguntó a sus discípulos, diciéndoles: ¿Quién dicen los hombres que soy yo? 28 Y le respondieron, diciendo: Unos, Juan el Bautista; y otros Elías; pero otros, uno de los profetas. 29 Él les preguntó de nuevo: Pero vosotros, ¿quién decís que soy yo? Respondiendo Pedro, le dijo: Tú eres el Cristo. 30 Y Él les advirtió severamente que no hablaran de Él a nadie. 31 Y comenzó a enseñarles que el Hijo del Hombre debía padecer muchas cosas, y ser rechazado por los ancianos, los principales sacerdotes y los escribas, y ser muerto, y después de tres días resucitar. 32 Y les decía estas palabras claramente. Y Pedro le llevó aparte y comenzó a reprenderlo. 33 Mas Él volviéndose y mirando a sus discípulos, reprendió a Pedro y le dijo: ¡Quítate de delan