Un nuevo corazón
Día 10 Con Jesús por la mañana. Hay momentos en los que necesitamos recurrir a aquellas palabras del salmista: «Crea Señor en mí un corazón puro. Renuévame por dentro con espíritu firme» (Sal 50, 10). Tenemos necesidad de purificar nuestras intenciones, motivaciones, pensamientos y sentimientos. Buscamos ser consolados, y no siempre nuestro consuelo hacia los demás es desinteresado. Queremos que nos comprendan, pero somos lentos para comprender más a los demás; deseamos ser amados incondicionalmente, pero no siempre estamos dispuestos a amar sin medida. ¿Tu generosidad y entrega son desinteresadas? Reza y ofrece el día por la intención de este mes. Realiza buenos gestos y acciones con los demás, sin esperar reconocimiento. Con Jesús por la tarde. «Levantando los ojos al cielo, suspiró y le dijo: "Efatá", que significa: "Ábrete". Y enseguida se abrieron sus oídos, se le soltó la lengua y comenzó a hablar normalmente..."Todo lo ha hecho bien: