Ejemplaridad
Día 2 Con Jesús por la mañana. “Eleazar, uno de los principales maestros de la Ley, de edad muy avanzada y de noble aspecto, fue forzado a abrir la boca para comer carne de cerdo. Pero él, prefiriendo una muerte honrosa a una vida infame,… De este modo, Eleazar deja al morir, no sólo a los jóvenes, sino a la nación entera, su propia muerte como ejemplo de generosidad y como recuerdo de virtud” (2 Mc 6 18-31). Identifica en tu vida los actos de generosidad y entrega que has dejado a los demás. Ofrece todo lo que vivas por la intención del Papa. Con Jesús por la tarde. “Presten atención, no se dejen aturdir con el vicio, la embriaguez y las preocupaciones de la vida, para que aquel día no los sorprenda de repente” (Lc. 21 34). ¿De qué llenas tu corazón? ¿Qué lugar ocupa en tu día el encuentro gratuito, la oración y el servicio a los hermanos? Repite: Señor fortalece mi voluntad de oración mientras sigues poniendo en práctica el propósito del día. Con Jesús