La belleza individual



Día 4

Con Jesús por la mañana. “La persona sólo se realiza como cristiana en la comunidad, y la comunidad sólo es posible cuando se presta atención a cada persona concreta con toda su originalidad insustituible” (Benjamín González Buelta). La belleza de Dios habita de manera única en cada persona. Diles a quienes amas cuánto bien te hacen compartiendo contigo sus talentos, anímalos a continuar haciéndolo. En este primer viernes de mes, jornada dedicada a orar por la intención del Papa, ofrece tu día por los artistas para que a través de las obras de su creatividad, nos ayuden a todos a descubrir la belleza de la creación.

Con Jesús durante el día. “Ellos se preguntaban asombrados: -¿De dónde saca éste su saber y sus milagros? ¿No es este el hijo del carpintero? (Mt 13, 54-55). Nos acostumbramos a lo cotidiano, y nos olvidamos que Dios está allí esperándonos en el día a día, en lo sencillo, en lo que no se nota. ¿Dónde buscas a Dios? ¿Dejas que Él te encuentre en la rutina de todos los días? Repite al ritmo de tu respiración: “Señor, dame un corazón atento para descubrir tu mirada sobre mí”, mientras descubres a Dios en los talentos de tus hermanos.

Con Jesús por la noche. Recuerda a las personas y ofrece. Aquieta la respiración y cierra los ojos. Recuerda a las personas que acompañaron tu día. ¿Qué te han dejado esos encuentros? ¿Cuánto amor has demostrado en el trato? ¿Alguien necesita que le pidas perdón? ¿Qué te hubiera gustado que fuera diferente? Apunta lo que descubras y ofrece a todas las personas que estuvieron en tu día.

Comentarios