Verdad y humildad
Hay momentos en que parece que preferimos ocultar nuestro valor personal, o esconder una capacidad particular por temor o vergüenza a ser considerados vanidosos o engreídos por los demás. Es entonces, cuando preferimos mentir sobre nosotros mismos a fin de ser considerado humildes. La verdad y la humildad no se oponen, sino que se complementan. Ser humildes es decir la verdad, pero al expresar una verdad hay que hacerlo con humildad.
Javier Rojas, sj
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